La discapacidad auditiva, también conocida como hipoacusia o pérdida auditiva, es una condición en la cual una persona tiene una capacidad auditiva reducida o nula (cofosis). La pérdida auditiva puede ser desde leve a profunda. Su causa puede ser congénita (presente desde el nacimiento) o adquirida en cualquier etapa de la vida.
Consecuencias en el desarrollo del lenguaje oral
La capacidad de oír es fundamental en el desarrollo del lenguaje oral, especialmente los primeros años de vida en donde la imitación de sonidos es el principal motor de aprendizaje. Los niños con discapacidad auditiva pueden experimentar dificultades tales como:
- Retraso en la adquisición del lenguaje: Pueden tardar más en decir sus primeras palabras o en forma frases.
- Desarrollo limitado del vocabulario: La exposición limitada a sonidos y palabras puede derivar en un pobre vocabulario expresivo y comprensivo.
- Problemas de articulación: Sus dificultades en discriminación auditiva les hace aprender de forma equívoca algunos sonidos y tienen problemas a la hora pronunciar determinados problemas porque no existe una retroalimentación adecuada.
- Dificultades en la comprensión auditiva: Entender o seguir una conversación puede resultar difícil para ellxs, y esto puede afectar a su rendimiento académico y socialización.
- Aislamiento social: Las barreras comunicativas pueden conducir a problemas de interacción social y aislamiento.
Ayudas protésicas e implante coclear
Para mejorar la audición y facilitar el desarrollo del lenguaje, existen diversas ayudas protésicas y tecnológicas:
- Audífonos: Amplificadores de sonidos indicados para pérdidas auditivas de leve a moderada.
- Implante coclear (IC): Dispositivo electrónico implantado quirúrgicamente. Indicado para pérdidas auditivas de severas a profundas. Convierte el sonido en señales eléctricas que estimulan directamente al nervio auditivo.
Rehabilitación desde la logopedia
El trabajo del logopeda en estos casos se centra en la evaluación, intervención y seguimiento del desarrollo del lenguaje y la comunicación en estos casos. Será importante tener en cuenta estos aspectos en el trabajo con pacientes con discapacidad auditiva:
- Intervención temprana: Será fundamental un diagnóstico precoz para comenzar a tratar cuanto antes las dificultades derivadas de esta pérdida.
- Entrenamiento auditivo: Entrenar habilidades auditivas (percepción auditiva, localización del sonido, reconocimiento y discriminación del sonido, comprensión auditiva, memoria auditiva, etc.) que serán prerrequisito para el trabajo posterior.
- Desarrollo del lenguaje oral: Mediante medios específicos, promover el desarrollo del lenguaje oral incluyendo la articulación correcta de los fonemas, el aumento del vocabulario y la estructuración de oraciones.
- Apoyo a las familias: Orientar y dar pautas y estrategias a las familias para apoyar el desarrollo del lenguaje y manejar las necesidades de comunicación del día a día.
- Coordinación con otros profesionales: Colaborar con audioprotesistas, médicos y educadores para desarrollar un plan de intervención que abarque el desarrollo integral del niño.